Simplemente no es el momento

Se acabo. Las cartas, las sonrisas escondidas y las miradas furtivas. Los sentimientos han muerto y todo se ha vuelto oscuro. Estaba tan cegada... el mundo se ha desmoronado poquito a poquito sin que pudiera hacer nada al respecto. El cuento de hadas llego a su fin. Te sientas en un rincón y lloras, lloras por todo lo que has perdido. Limpias tus lagrimas y dejas de llorar, simplemente no era el momento. Parece que nada ha pasado, que todo está bien. Ciertamente todo está bien, el mundo sigue girando, pero yo no. Mi tiempo se ha parado, y bien se que llorar de nada puede servirme, pero no puedes parar. Todo parece oscuro, sin solución, todo parece un túnel sin luz, pero debes seguir adelante, por ti y por todos los que te apoyan.

Y hoy recuerdas todo lo pasado, todos los recuerdos y piensas que tampoco fue todo tan malo. Miras las fotos y con cada una de ellas revives un momento, un sentimiento y una ilusión. Recuerdas las caricias y todos aquellos dulces e interminables besos. Recuerdas todas aquellas sonrisas que te regalaba. Y sonríes al darte cuenta que eras feliz junto a él, todo lo que lo querías y sabes que nunca sentirás nada igual por nadie.  Él nunca ha desaparecido de tu pensamiento y mucho menos de tu corazón, pero algún día sabes que llegará alguien que te recuerde todo lo que significa tener corazón, que te quite el sueño pero sobre todo que te merezca. Muchos amores aparecerán, cada uno especial a su manera y todos se marcharan antes o después, solo debes pensar que simplemente no era el adecuado o que no era el momento, pero habrá uno que no se marchara. Construirá su mundo a tu alrededor y te llenara de vida, solo debes esperar, ahora mismo no es el momento, ahora debes vivir. 

Todo tiene su momento

¿Sabes que es lo que es sentirse sola estando rodeada de personas? ¿Sabes lo que es temer a algo tan pequeño y la vez tan grande que ni siquiera puedes pensar en ello? ¿Sabes que es amar y no ser correspondido? ¿Sabes que es querer vivir un sueño que sabes que nunca podrá ser real?


Yo sí. Yo lo he vivido, pero quizá no es suficiente. La vida te enseña muchas cosas, te enseña a sentirte acompañada cuando nadie te mira, te enseña a tener miedo a cosas que no queremos perder, que tal vez sean tan pequeñas que ni siquiera tengan un sentido demasiado importante, te enseña a amar sin ser correspondido, te enseña que a veces vivir en un sueño no es tan malo como parece, que tan solo debes tener cuidado con no caerte.


No siempre será un cuento de hadas, no siempre tendrás grandes y acolchados colchones sobre los que caer. No siempre tendrás un príncipe que te coja de la mano. No siempre tendrás gente que te felicite a cada paso que des, ni tampoco serás siempre bien recibida a cada sitio al que vayas. No siempre tendrás todo lo que desees, ni tampoco serás siempre la más deseada. Pero todo tiene sus pros y sus contras, todo tiene su parte buena y su parte mala. Si tan solo miras la parte mala, ¿de qué te sirve la buena? Cada cosa pasa en su momento, ni antes ni después. En tu vida pasaran muchas cosas, cambiaran algunas y otras desaparecerán, pero siempre debes mirar hacia atrás, mirar de dónde vienes, porque mirar para delante de poco sirve, el futuro es como una mancha borrosa, sin forma y sin color. Siempre puede variar pero el pasado no, las personas cambian pero el pasado no. 

Sentimientos hondos

Hay veces en las que creemos que por ser nosotros, lo merecemos todo. Que por sentirnos persona tenemos unos derechos, pero como sabes si eres una persona? Como sabes si de verdad lo mereces?
Yo creo que todo tiene un porque, un tal vez y un quizá, solo hace falta tener el valor suficiente como para querer saber la verdad. Todo se puede demostrar de una manera o de otra, tan solo hay que encontrar el modo adecuado, para cada cosa. La amistad se puede demostrar con un abrazo, la felicidad con una sonrisa y el amor con un beso. La tristeza se puede demostrar con una lágrima, la ira con un grito y la inquietud con un movimiento. Todo se puede demostrar, pero hay veces en las que nos da miedo saber el porqué, el tal vez y el quizá. La gente cree que por poseer dos piernas, dos brazos y un poco más de cuerpo, eso ya nos convierte en personas. Pero yo creo que un ser humano se convierte en persona y se siente como tal cuando siente algo, las lagrimas de una mujer al escuchar por vez primera la voz de su bebe, la sonrisa del padre al ver sacar buenas notas a su hija, la felicidad inocente de un niño al  abrir sus regalos de navidad o el sentimiento de estar completo cuando encuentras una nueva amistad. Esas cosas son las que te hacen ser persona, esas cosas son las que se debe recordar siempre, esas cosas son las que crean recuerdos y los recuerdos sonrisas. Son todas esas cosas que no se sienten con la cabeza si no que se sienten por el corazón, algo tan hondo que cinco segundos de sentimiento llena de gozo miles de años. No tenemos derechos por ser humanos, tenemos derecho por ser personas que sienten, y tan solo lo mereces cuando has vivido alguna de esas emociones. 

Primer encuentro

Una tarde lluviosa de abril, un chico está esperando en la parada del autobús, bajo un enorme paraguas negro, cuando de repente llega una chica corriendo porque llueve a cantaros.

La chica llega, se sitúa bajo la parada y se intenta secar un poco el pelo.
- Creo que esto no te vendrá nada mal- dice el chico mientras le extiende un pañuelo morado.
- No, la verdad es que viene muy bien, muchas gracias- dice la chica mientras extiende la más grande de sus sonrisas.
Mientras la chica intenta secarse la cara con el pañuelo.
- Nadie te ha dicho nunca que eres tan bonita… como una flor a la luz del amanecer, con todas sus gotitas de rocío.
La chica se sonroja levemente.
- Nadie me lo había dicho jamás, debo reconocer que esto no me lo esperaba del chico del pañuelo, creía que eras más vergonzoso- dice mientras intenta tapar el rubor de sus mejillas con el pañuelo.
- El chico del pañuelo se llama Miguel, pero no sabe el nombre de la bella flor que lo acompaña, seria la señorita tan amable de poder concederme el placer de saber quién es la chica de la lluvia?
- Creo que es un trato justo, soy Emily- dice mientras se acerca para presentarse formalmente con dos besos.

Miguel gira la cara en el último momento y besa a Emily en los labios, la otra sorprendida, no se aparta, realmente en chico era guapo, y caballeroso, ella se siente totalmente atraída hacia él, y antes de poder darse cuenta sus dedos ya están enredados con los cabellos de él.
El sonido del autobús, los saca del mundo del amor, los dos suben, sin tan siquiera mirar cual era, se sientan y van hablando todo el camino.


El amor puede surgir en el momento más inesperado y con la persona que menos creías. El amor consiste en conocer una persona y construir todo tu mundo a su alrededor. El amor consiste en unir dos corazones en un solo latido. 

Los príncipes azules también destiñen - Megan Maxwell

Título original: Los príncipes azules también destiñen Autor: Megan Maxwell Saga: No. Autoconclusivo. Año: 2012 Editorial: Versa...